sábado, 28 de febrero de 2015

¿Cómo y cuándo beber agua para adelgazar?

1.- Al levantarnos - Agua tibia

Durante la noche las funciones metabólicas se mantienen activas, en las últimas horas del ayuno los órganos (principalmente los digestivos) entran en un periodo de descanso, por lo que al despertarnos estos se encuentran en reposo.

Si lo primero que consumimos en el día es un alimento sólido este llegará al estómago de forma repentina y se activará con sobrecarga provocando así que iniciemos el día con digestiones lentas y pesadas.

Es muy importante que lo primero que reciba nuestro estómago sea algo muy ligero y no hay nada mejor que el agua. Esta debe estar tibia. No fría, no caliente pues al estar nuestros órganos en reposo podrían presentar una alteración con el cambio brusco de temperatura.

2.- Antes de las comidas - A temperatura ambiente

Aunque por décadas se ha mantenido que tomar un vaso de agua antes de comer ayuda a saciar el hambre y como resultado comer menos, esta no es la verdadera razón del porqué es importante beber agua antes de comer. Cuando tomamos agua media hora antes de la comida ayuda a facilitar el proceso de digestión, así como también ayuda a que los nutrientes de la comida sean mejor absorbidos.

3.- Al hacer ejercicio - Fresca

Debemos de tomar un vaso de agua media hora antes de hacer ejercicio, para estar hidratados. Durante el ejercicio tomar 1 o 2 tragos cada 15 minutos, para evitar la deshidratación. Un vaso de agua al finalizar el ejercicio para reponer el líquido perdido por medio del sudor.

Cuando hacemos nuestra rutina no es recomendable beber el agua muy helada pues al ejercitarnos nuestra temperatura corporal aumenta.

4.- Al experimentar antojos

En muchas ocasiones la sed se disfraza de antojos sobre todo por alimentos dulces. Cuando presentamos antojo es mejor tomar un vaso de agua. Si el antojo no pasa es señal que en los últimos días nuestra ingesta de nutrientes ha sido insuficiente, debemos identificar qué necesita nuestro cuerpo y así eliminar antojos por alimentos dulces o salados.

5.- Al sentir sed - A temperatura ambiente o fresca

No hay mejor momento para tomar agua, que cuando nuestro cuerpo lo pide. Aunque no debemos necesariamente esperar a tener sed para beber agua no olvidemos que nuestro cuerpo es muy sabio y sabe lo que necesita o no. Pero es importante recordar que en estos tiempos el ritmo de vida no permite la sana expresión de nuestro cuerpo, que nosotros mismos llegamos a bloquear sus necesidades, así que debemos poner atención a las señales, ya que el dolor de cabeza, cansancio, mal humor, también son señales que gritan la falta de agua en nuestro cuerpo.

6.- A media mañana y media tarde - Fría

Cuando pasamos varias horas sin comer o beber, nuestros órganos entran en inactividad así que la mejor forma de ponerlos en marcha es bebiendo medio vaso de agua. Si consumimos agua fría el cuerpo necesitará calentarla hasta alcanzar la temperatura corporal y para lograrlo requiere gastar energía con lo cual quemamos calorías extra.

7.- Para desintoxicar

Toxinas es igual a grasa ya lo explicamos con anterioridad. Mientras las toxinas estén en el cuerpo la grasa que las contiene no se irá ni con 5 horas de gimnasio diarias, pues está protegiendo nuestros órganos vitales. Aunque el cuerpo de forma natural tiene su proceso de desintoxicación durante el ayuno, la gran exposición a la contaminación, alimentos altamente procesados, químicos, etc., hacen que esta tarea sea casi misión imposible por lo que necesita ayuda, una buena opción es hidratarnos con esta receta jugo altamente desintoxicante o con bebidas muy ligeras como el agua depurativa.

jueves, 26 de febrero de 2015

LOS EXPERTOS CONSIDERAN QUE DETRÁS DEL CONTEO DE CALORÍAS, EXISTEN TRASTORNOS DE LA CONDUCTA ALIMENTARIA.

Hacer de la obsesión por la comida su realidad es el denominador común en los trastornos de conducta alimentaria como la anorexia y la bulimia, y afecta a nueve mujeres por cada hombre. Conoce qué comportamientos suelen preceder a estas enfermedades cuyo origen va más allá de una “preocupación” por la imagen y el peso.

En una sociedad donde la apariencia física es un valor en sí mismo, no es de extrañar que haya una preocupación por la imagen. Sin embargo, cuando este miramiento “se torna el centro de tu vida y todo lo demás deja de tener importancia, tenemos un trastorno”, explica Marina Díaz Marsá, psiquiatra en el Hospital Clínico San Carlos y presidenta de la Sociedad de Psiquiatría de Madrid.

La directora médica del centro Sommos Desarrollo Personal define los trastornos de conducta alimentaria como “la alteración en la ingesta de alimentos asociado a una preocupación terrible por la figura y por el peso que finalmente termina haciendo que tu vida no funcione” y matiza, este último detalle es el que marca la diferencia.

Las conductas que llevan al trastorno

Los trastornos de conducta alimentaria tienen lugar en el día a día y en el entorno más cercano. La experta nos indica cuáles son los comportamientos y cambios que constituyen señales de alarma y nos ayuda a identificarlos.

En la anorexia restrictiva se produce una reducción drástica de los alimentos, afirma la facultativa, quien señala que se empieza por una dieta; se sigue con la supresión de productos que se piensa que engordan, como el pan; se deja de salir de casa; y finalmente, la alimentación “se torna mínima, de forma que se produce una pérdida progresiva de peso”.

En el caso de la bulimia nerviosa, la ingesta no se reduce tanto pero se producen atracones, comiendo mucho en un corto periodo de tiempo, aclara.

Tras el empacho, llega la culpa y “generalmente se provoca el vómito para evitar tener esa ingesta calórica”. Díaz precisa que estos casos donde la pérdida de peso no es tan evidente, a veces los cambios de carácter pueden ser la señal que nos alerte de que algo va mal.

La realidad que el trastorno esconde

La afección de estas enfermedades se da con una proporción de nueve mujeres por cada hombre. Una diferencia significativa motivada por dos causas fundamentales, según indica la experta:

La presión social que tiene la mujer de la delgadez, no es la misma que tiene el hombre. Desde el punto de vista biológico, las mujeres tienen más predisposición que los hombres a este tipo de trastornos. Aunque parece que la imagen es siempre el detonante, puede haber múltiples causa. “Debajo de estos trastornos siempre hay algún tipo de conflicto” advierte Díaz, quien los compara con “la punta de un iceberg” cuyo cuerpo se compone de problemas de autoestima, emocionales, familiares o miedo a madurar, un conjunto de situaciones de las que “no estamos libres ni hombres ni mujeres”.

La especialista expone que los problemas causan más angustia que el control de la comida en los pacientes, quienes detienen su mente y conducta en la alimentación. De este modo, “no afrontamos el verdadero conflicto y estamos luchando todo el día con la ingesta y con la caloría, cuando esa necesidad de control de la alimentación radica en otro tipo de problema”, afirma.

Los pacientes tienen “una alteración en la percepción de la imagen” que provoca que se vean con más volumen. Este problema suele ir acompañado de baja autoestima, “no ven sus características positivas y siempre las de los otros les parecen mejor, por eso, se comparan constantemente”. Asimismo, suelen ser personas perfeccionistas, rígidas y obsesivas.

Abordar la enfermedad, detectar el conflicto

Dar con el detonante del problema es una tarea compleja pero para poder llegar a este punto el paciente “tiene que estar bien”, sostiene la especialista. A veces, los estados anímicos vinculados a los trastornos requieren tratar al paciente con medicación para después hacerlo de forma psicoterapéutica, apunta.

“La pelea con la caloría o la alimentación se convierte en su línea vital, y abandonarla les cuesta trabajo”, afirma la psiquiatra, quien precisa que estas enfermedades necesitan de dos a cinco años de tratamiento.

El sentimiento de culpa está presente en muchos casos, sin embargo, la realidad es que “una vez diagnosticado el paciente tiene la responsabilidad de salir de ahí y trabajar por ello pero se es culpable de tenerlo”, sostiene la facultativa.

Los pacientes no suelen pedir ayuda por sí mismos y niegan la enfermedad, apunta Díaz. Ante este contexto, la familia constituye un pilar fundamental. Por ello, se debe hacer un abordaje familiar para ayudarles a saber cómo tratar al paciente, asevera.

Estas personas “no controlan a la comida sino la comida les controla a ellos”, asevera la especialista quien que explica que el sufrimiento derivado de la obsesión por la comida puede mejorar con ayuda y hace hincapié en que “nadie pretende engordarlos sino que sean personas con capacidad de desenvolverse en la vida y de estar bien”.

martes, 24 de febrero de 2015

La mujer que engordaba porque comía mientras dormía

Cuando la universitaria británica Kate Archibald, de 20 años, empezó a ganar peso de forma drástica, se preocupó mucho porque no podía entender lo que le estaba sucediendo.



Pero cuando una mañana se despertó con la cama cubierta de empaques de comida, se dio cuenta que había estado comiendo mientras dormía.
Poco después fue diagnosticada con una afección conocida como Trastorno de Alimentación Relacionado con el Sueño (TARS).



Según la Clasificación Internacional de los Trastornos del Sueño, se trata de una combinación de parasomnia (una alteración de la conducta durante el sueño que incluye el sonambulismo) y un trastorno de la alimentación.

¿En qué consiste?

El TARS ha sido descrito como un estado de sonambulismo que incluye comportamientos relacionados con deseos conscientes de una persona, según John Winkleman, profesor asistente de psiquiatría de la Facultad de Medicina de Harvard, en Estados Unidos.



Se cree que la afección está estrechamente relacionada con el llamado síndrome del comedor nocturno.



Pero la diferencia es que las personas que sufren este último trastorno están completamente despiertas y son conscientes de sus hábitos de comer compulsivamente, al contrario de las que padecen del trastorno alimentario relacionado con el sueño.



Winkleman afirma que ambas condiciones afectan a alrededor de un 5% de los adultos y predominantemente a mujeres adultas jóvenes.



Estos pacientes pueden presentar diferentes patologías de sueño, como parasomnias, Síndrome de Apneas-Hipoapneas del Sueño (SAHS), Síndrome de Movimientos Periódicos de Miembros (SMPM), Síndrome de Piernas Inquietas (SPI), narcolepsia y trastornos del ritmo circadiano (el que regula la vigilia y el descanso).



La realización de una polisomnografía (una prueba de múltiples parámetros usada para estudiar del sueño) puede mostrar hallazgos importantes que permiten caracterizar el episodio nocturno, así como la posibilidad de verificar la coexistencia de otras patologías.



Consecuencias


Según los expertos, el TARS es un trastorno que causa aumento de peso, alteración del sueño y vergüenza por la pérdida de control sobre la ingesta de alimentos.



"Habitualmente, los que sufren este trastorno ingieren alimentos ricos en hidratos de carbono o tienen predilección por lo dulce. Algunos mezclan cosas que no tienen nada que ver, como salchichas con galletas dulces", afirma Julia Santin, neuróloga chilena experta en trastornos del sueño de la Red de Salud UC CHRISTUS.
"El problema es que hasta podrían cocinar sin darse cuenta, pudiendo quemarse y eso significa un riesgo", añade.



Según la experta, la periodicidad de los despertares nocturnos para levantarse a comer es variable.

"En algunos casos la frecuencia es bastante baja, una vez cada dos meses, pero en otros se puede producir hasta diez veces en una misma noche. A las personas que están en pareja esto les termina ocasionando problemas en su relación".



"Otro inconveniente es que muchas veces no pueden guardar ayuno para el día siguiente y tienen serias dificultades para hacerse exámenes de sangre e incluso cirugías electivas", agrega Santin.



"Por último, este trastorno es una causa subvalorada de sobrepeso y obesidad, lo que expone a mayor cantidad de complicaciones cardiovasculares, especialmente si ya se es diabético, por ejemplo".

domingo, 22 de febrero de 2015

La genética es el factor más importante de la obesidad

Investigadores del Consorcio Internacional de Investigación Genética de Rasgos Antropométricos (GIANT) analizaron muestras genéticas de medio millón de personas con el fin de estudiar la obesidad y la distribución de la grasa corporal. Es el estudio más grande sobre la variación genética realizado hasta la fecha y los resultados identificaron más de 140 lugares o "loci” en todo el genoma que juegan papeles en distintos rasgos de obesidad. El trabajo puede ser el primer paso para identificar los genes individuales que juegan un papel clave en la forma y en el tamaño de nuestro cuerpo.

sábado, 21 de febrero de 2015

DIETAS POPULARES QUE NO SIRVEN PARA NADA.

Existen dietas para todos los gustos. Si no le gusta la alcachofa, puede probar con la del espárrago. Y si esta no funciona, darle una oportunidad a la piña (desayuno, merienda y cena durante una eterna semana). “Si quieres, nos inventamos otra ahora mismo: la dieta del orden alfabético”, bromea Irene Bretón, de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN). Hoy comes A-celgas, mañana B-onito, pasado C-arne de C-aballo… y así hasta la zeta. A continuación, desmentimos las cinco dietas más populares y le contamos por qué no son la mejor opción para un plan de adelgazamiento (en ocasiones, incluso son la peor).

MENTIRA 1 Depurativas

No cumplen su objetivo. “Cualquier dieta que te haga comer menos calorías te va a inducir a una pérdida de peso”, comenta Bretón, quien, sin embargo, alerta de que muchas de ellas son deficitarias de algún nutriente esencial. El objetivo de un plan depurativo (el famoso fenómeno detox) pasa por fintar la retención de líquidos y la hinchazón debido a los excesos: “regular el organismo y eliminar toxinas”, dicen los que se pasan unos días a base de infusiones, verduras y frutas, o incluso en ayunas.

“Nuestro cuerpo elimina toxinas a través del sudor, la orina y la defecación”, desmiente Xavier Formiguera, presidente de la fundación de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad. Este experto también explica que no pasa nada por pasarse un día en ayunas, pero advierte de que no sucederá la ansiada depuración, “más allá de una sensación subjetiva”.

MENTIRA 2 Monotemáticas

Rompiendo el equilibrio. Se estructuran a partir de un alimento con pocas kilocalorías. El régimen de la alcachofa, la piña y el espárrago son tres de los más populares. “Una dieta basada en un alimento concreto provoca un déficit de macronutrientes, básicamente de hidratos de carbono”, valora Formiguera. El especialista compara este plan nutricional con las dietas paleolíticas, hace un tiempo tan en auge. Esta dieta se compone en alimentos disponibles en la época de las cavernas (excluye granos, legumbres y lácteos), “cuando la esperanza de vida era de entre 30 y 35 años”, evoca. El equilibrio nutricional está “muy bien estudiado y contrastado”. Según este especialista en endocrinología, una dieta equilibrada se compone por un 15% de proteínas, un 30% de grasas (de las cuales, máximo, un 10% son saturadas) y un 55% de hidratos de carbono, preferiblemente de absorción lenta, como el pan, la pasta y el arroz.

MENTIRA 3 Hiperproteicas

Maltratan el riñón. El método Dukan es la dieta hiperproteica por excelencia, basada en el consumo excesivo de proteínas de origen animal (los célebres desayunos de filete a la plancha). Numerosos estudios ya han demostrado las consecuencias sobre la salud después de haber seguido pautas alimentarias de este estilo. Justo hace un año, científicos de la Universidad de Granada probaron en ratas que dietas altas en proteínas destinadas a la pérdida fácil y rápida de peso aumentan el riesgo de desarrollar enfermedades de riñón a largo plazo. Los investigadores andaluces formaron dos grupos de diez ratas. Uno siguió una dieta hiperproteica mientras que el otro se alimentó de forma normal. Después de 12 semanas, los roedores que estuvieron a régimen perdieron un 10% de su peso corporal, mientras que el del riñón aumentó casi una cuarta parte y empeoró su perfil morfológico. “El riñón necesita trabajar más para excretar el exceso de urea proveniente de las altas dosis de proteína”, comenta Virginia Aparicio Garcia-Molina, autora principal del estudio y profesora de la Universidad de Granada. El magnate de las dietas hiperproteicas se defiende de las polémicas en su web argumentando: “Pierre Dukan está dispuesto a aceptar esos ataques, ya que para cambiar la sociedad, a veces, hay que atreverse a sacudirla”.

Irene Bretón expresa que el cuerpo interpreta la restricción calórica de una dieta como una falta de patrimonio, y pone en marcha mecanismos fisiológicos para tirar de reservas. “Esto nos permitió sobrevivir como especie cuando llegaba una época de hambruna”, ejemplifica. “Pero cuando dejes la dieta vas a ganar más peso del que habías perdido”, sentencia con seguridad sobre lo que se conoce como efecto yo-yo. Su consejo es compensar el gasto calórico con actividad física, ya que el ejercicio es “determinante” en la pérdida de peso y un estilo de vida más saludable. En ese sentido, Formiguera también destaca la importancia de la alimentación: “La dieta es como un medicamento que te tomas tres veces al día durante toda la vida”.

MENTIRA 4 Macrobiótica

Sin rigor científico. “Este tipo de dieta es más un estilo de vida que influye en la persona que una pauta alimentaria”, asegura su creador, George Ohsawa. Sus defensores comen productos de temporada, la mayoría de origen vegetal. La base nutricional son los cereales, que se consumen preferiblemente en forma de grano integral, como el arroz. La dieta macrobiótica se inspira en tradiciones gastronómicas orientales y en el equilibro entre el Yin y el Yang. La ciencia poco tiene que decir sobre ella, pues el método científico se basa en calorías, nutrientes y otras propiedades que poco ligan con los conceptos del taoísmo. El periodista Robert Christgay, heredero del nuevo periodismo impulsado por Tom Wolfe, escribió el reportaje novelado Beth Ann y la macrobiótica, que relata la muerte de la chica.

MENTIRA 5 El crudiveganismo

Un trabajo extra. Los crudívoros y veganos se alimentan de productos vegetales sin cocinar ni procesar. Sus practicantes, vegetarianos, aseguran que los alimentos crudos son mejores para la salud porque no eliminan vitaminas ni minerales, pero cocinar es básico en la alimentación, aunque sea complicado para la ciencia determinar si los vegetales se consumen mejor crudos o cocidos. Un estudio, publicado hace unos años en The British Journal of Nutrition, hizo un seguimiento a 198 crudívoros. Y determinó que sus niveles de vitamina A eran correctos y los de beta-carotenos un poco altos, más los niveles de licopeno lucían bajísimos. Hay numerosas investigaciones en curso sobre el papel que cumple este antioxidante, cuya carga aumenta con la cocción, en la prevención del cáncer, aunque falta evidencia científica. Lo que sí está claro es que el vegetarianismo ha de ser una opción vital, y no un plan de adelgazamiento, además de requerir de una dosis extra de planificación.

sábado, 14 de febrero de 2015

Relación ¿Sabías que pelear te hace engordar?

Las discusiones de pareja forman parte de cualquier relación, pero ¿sabías que pueden ser las responsables de algunos kilos demás? Te contamos por qué. Según un estudio que ha realizado el Instituto de Medicina del Comportamiento de la Universidad de Ohio, las personas con estrés, depresión o problemas de ánimo y que tienen discusiones de pareja frecuentemente, tienen mayor riesgo de sufrir obesidad. ¿El motivo? La manera en que su cuerpo procesa los alimentos ricos en grasas. Como conclusión del estudio, los expertos afirman que las discusiones de pareja muy habituales y agresivas provocan un aumento de la cantidad de insulina en sangre, lo que estimula la ingesta de alimentos y la acumulación de grasa abdominal tan perjudicial para la salud. En personas con problemas de estrés y ansiedad, puede aumentar los triglicéridos, responsables de importantes enfermedades cardiovasculares. Antes de discutir, intentad hablar y razonar. Tu cuerpo y tu mente te lo agradecerán.

viernes, 13 de febrero de 2015

Cómo adelgazar gracias a las fajas

La toma de peso, envejecimiento o embarazo dejan rasgos sobre la figura. Las fajas adelgazantes son ideales para afinar y moldear la silueta sin realizar muchos esfuerzos. Están disponibles en diferentes modelos y tienen agentes reductores naturales impregnados en sus tejidos. Además, se adaptan a las distintas morfologías de las personas y no dejan ninguna marca sobre la ropa. De hecho, son casi invisibles.

El funcionamiento de las fajas adelgazantes es sencillo. Aportan un efecto de drenaje, pérdida de peso y afinamiento del vientre, ya que contienen diferentes principios activos como la cafeína y té verde. Estos agentes estimulan la circulación sanguínea y masajean continuamente la piel. Se liberan gracias a la temperatura de la epidermis. Esto favorece también la eliminación de celulitis. Para tener repercusiones notables, es necesario colocarse la faja durante todo el día por una duración de un mes como mínimo. De esta manera, perderás varios centímetros en tu cintura y tus tejidos cutáneos se volverán más firmes. No olvides que esta prenda no es milagrosa. Es también recomendado adoptar una alimentación equilibrada y tener un estilo de vida sano para complementar el impacto positivo de la faja.

Advertencias y contraindicaciones

Las fajas adelgazantes se convierten en excelentes aliadas para afinar la silueta. Sin embargo, no convienen a todas las personas. En primer lugar, suelen comprimir diferentes órganos (estómago e intestinos), lo que puede acentuar los reflujos gástricos en ciertos pacientes. Esto afecta el proceso de digestión y provoca flatulencias o gases. De esta manera, la gente que tiene colon irritable y problemas digestivos no debe utilizar estas fajas.

Por otro lado, se recomienda a las personas que tienen trastornos de circulación

sanguínea no recurrir a las fajas adelgazantes para moldear su silueta, ya que pueden incrementar las varices y trabar el funcionamiento linfático.

En cuanto a los pacientes que sufren de incontinencia urinaria, estas prendas adelgazantes comprimen la vejiga, lo que empeora su condición. En este caso, es necesario optar por una faja específica prescrita por un médico.


martes, 10 de febrero de 2015

Proponen multar a padres de niños obesos

Un senador puertorriqueño ha presentado un proyecto de Ley para multar a los padres de los niños obesos, una iniciativa que despertó hoy todo tipo de críticas en la isla, que sufre de un elevado índice de obesidad infantil.

La polémica fue tal que durante el día el senador proponente, Gilberto Rodríguez Valle, tuvo que salir al paso y en declaraciones a la prensa decir que estaba dispuesto a revisar su propuesta.

Su iniciativa, que se tramita en el Senado, propone multar a padres de niños obesos y acusarlos de maltrato si durante un período determinado los menores no muestran mejoras en su condición física.

"No es la forma correcta de hacerlo. Va a traer complicaciones porque hay nenes obesos por complicaciones médicas y factores genéticos", decía hoy al diario El Nuevo Día Ricardo Fontanet, presidente de la Academia Americana de Pediatría en Puerto Rico.

La propuesta establece que el Departamento de Educación sea el responsable de identificar los casos en mayor riesgo de obesidad infantil que no sean producto de una condición de salud preexistente o aleatoria y orientar a los padres sobre las consecuencias de ese mal.

Según el proyecto, que se debate en el Senado, si a los seis meses considera que el menor no ha mejorado, el trabajador social podrá remitir el caso al Departamento de la Familia.

Si pasado un periodo similar sigue sin haber mejora se propone multa a los padres o encargados del niño con 500 dólares. Si seis meses después tampoco hay progreso, se impondría otra multa de 800 dólares.

Sin embargo, el senador José Luis Dalmau defendió hoy la idea y argumentó de que un niño obeso "es un problema de salud y puede convertirse en una carga económica porque podría desarrollar enfermedades del corazón, diabetes y otras" patologías.

A su juicio, "tiene que haber consecuencias para los padres de niños obesos".

La nutricionista Milly García, recordó que gran parte de la culpa de la elevada obesidad infantil no recae sobre la actitud de los padres sino sobre las dificultades económicas.

"Que la mitad (de los casos de obesidad infantil) esté relacionada a estilos de vida no da derecho a entrar en estos espacios. Esto no es maltrato, es una enfermedad", defendió.

En la exposición de motivos de la propuesta se apunta que la obesidad infantil es uno de los problemas de salud pública de más alto crecimiento en el siglo XXI.

"Es una realidad innegable que lamentablemente estamos viviendo una etapa social donde la familia vive muy desconectada. Los padres trabajan demasiado y caen presos del estrés brindándole cada vez menos atención a sus niños", añade.

La obesidad es un problema de salud pública

Una buena nutrición, que incluye una dieta suficiente y equilibrada combinada con el ejercicio físico regular es un elemento fundamental de la buena salud, dice la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esta es la premisa que manejan diversos profesionales de la nutrición en la actualidad. Rocío Medina, vicepresidente de Capacitación sobre la Nutrición Mundial de Herbalife y Protagonista de este martes sigue este enunciado. Fue profesora de Nutrición y Obesidad y junto con otros profesores implementó un programa de estudios en este campo en la Universidad de Monterrey, en Nuevo León México. Fundó con sus colegas el Colegio de Médicos y Profesionales de Nutriología y Obesidad en el año 2000, institución que presidió del 2009 al 2010. Egresó de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Nuevo León y recibó su certificado de especialista en Nutrición y Obesidad por parte de la Universidad de Monterrey en el 2010. En el 2007 fundó la clínica de alta tecnología sobre el mismo ámbito en Monterrey. "He dedicado mi carrera a través de la práctica clínica, a la nutrición y obesidad desde 1998 hasta la fecha", resumió la especialista.

¿Cuál es el motivo de su visita a Santa Cruz?
R.M.: La extravaganza es el evento más importante de capacitación para miembros y asociados de la empresa Herbalife, al que fui invitada a participar. La finalidad es compartir conocimientos y el estilo de vida activo.

¿Qué tan importante es el trabajo del médico nutricionista?
R.M.: Principalmente los problemas de salud por mal nutrición siguen cobrando millones de vidas alrededor del mundo. Por ejemplo, las primeras causas de muerte a nivel global están relacionadas con malos hábitos alimenticios y el sedentarismo, de manera que la nutrición juega un papel crucial en preservar la salud de las personas.

¿es suficiente el número de estos profesionales en Latinoamérica?
R.M.: Lamentablemente no, ni contamos con suficientes profesionales de la salud para contrarrestar esta tendencia de mal nutrición. Esto no solo sucede en Latinoamérica, sino también en distintas partes del mundo entero.

¿Cómo ve el tema de la nutrición en Latinoamérica a comparación con otros continentes?
R.M.: Las tendencias nutrimentales son por igual en distintas partes del planeta tierra. Por su parte la incidencia de obesidad y sobrepeso está aumentando cada vez más. Mientras la comida rápida y el uso excesivo de grasa y azúcares ya se esparció por igual en todo el mundo.

¿Cuáles son los males que afectan al tema de la nutrición?
R.M.: Esto es debido a la falta de educación a la hora de la alimentación y la falta de alternativas saludables. Por otro lado, está el tema de las madres de familia que trabajan y esto quita tiempo y atención a la hora de preparación de los alimentos. Eso sin contar con los escasos minutos que dedican al ejercicio y el reino de la comida chatarra, que es bastante económica y se la puede adquirir con facilidad.

¿La obesidad continúa siendo un problema?
R.M.: Sí, porque su incidencia sigue creciendo a nivel mundial. Eventualmente este aumento se desacelerara, pero eso no significa que estemos encontrando la solución.

¿Cómo se pude luchar contra un problema como la obesidad?
R.M.: Debe ser abordado como eso: un problema de salud pública y una enfermedad multifactorial que necesita múltiples abordajes. Se debe conjuntar esfuerzos entre el sector gubernamental, sector salud y población adulta. Y lógicamente para ello se requiere educación.

¿La obesidad ataca más a las personas mayores?
R.M.: Y también a los menores de edad, por ejemplo, la obesidad infantil sigue aumentando en incidencia a la par que la obesidad del adulto. El 80% de los niños obesos crecerán con ese problema. Lo que sí estamos viendo es mayor incidencia de enfermedades cronicometabólicas (del adulto) en niños, cosa que antes no veíamos.

Finalmente ¿qué proyectos tiene Herbalife para el futuro?
R.M.: En el área de entrenamiento, tenemos proyectado aumentar nuestros recursos, a través del crecimiento de nuestro Consejo Consultor de Nutrición. Además ya implementamos dos consejos: DAB (Consejo Consultor de Dietistas) y FIB (Consejo Consultor de Coaches Deportivos).

domingo, 8 de febrero de 2015

La fuerza de voluntad también se entrena



¿Eres de los que se apunta al gimnasio y luego no va? ¿O tal vez no puedas resistirte a picar entre horas? ¿Te gustaría saber por qué te metes en problemas aun sabiendo que te perjudicarás? ¿O por qué sigues con esa persona que te hace sufrir? Si eres de los que cada primero de año se propone buenos propósitos que luego no cumples, si te cuesta decir no cuando realmente quieres decir no, esta información es para ti.

A mediados de enero sólo el 25 por ciento de las personas mantiene sus buenos propósitos pero seis meses después esta cifra mengua hasta un 5 por ciento . ¿Por qué?, Marta Romo, pedagoga y directora de Neuroclick, desvela el misterio: “Para el cerebro es agotador incorporar nuevos hábitos, lo sencillo es continuar con sus rutinas. Entrenar la voluntad es la solución. Difícil pero no imposible”, advierte esta experta.

De hecho, la fuerza de voluntad reduce la tasa de ejecución de los impulsos negativos del 70 por ciento al 17 por ciento . Un estudio de la Universidad de Chicago -realizado por el psicólogo Wilhelm Hofmann (2001)- demostró que cuando las personas ceden a un deseo o impulso, lo ejecutan aproximadamente el 70 por ciento de las veces, mientras que cuando se resisten los ejecutan solo el 17 por ciento . Es decir, tirar de voluntad frena más del 80 por ciento de los impulsos no deseados.

No hace falta ser muy observador para detectar la incoherencia del ser humano: una cosa es lo que sabe y dice y otra -a veces diametralmente opuesta- lo que hace: desde fumar, a los malos hábitos alimenticios, a la vida sedentaria o a no usar casco siendo motoristas.

“La buena noticia es que como humanos somos libres y la voluntad es la clave para navegar por esas aguas. La ausencia de voluntad hace que cuando tengamos que tomar una decisión nos queda lo inmediato, que pensemos únicamente en los beneficios presentes y no tengamos en cuenta las consecuencias, o no veamos más allá. Nos hacemos esclavos de nuestros instintos y dejamos de ser libres, porque la mente sin voluntad se anula en la acción”, argumenta Marta Romo, autora de Entrena tu cerebro.

En la actualidad, añade Romo, el déficit de voluntad en la sociedad conduce a un gran sufrimiento e incluso a trastornos psicológicos, con el agravante de que se trata de un valor con poco protagonismo en la educación.

“Preferimos dar caprichos a los niños para evitar que lloren, o a los adolescentes por evitar una discusión. Y lo hacemos con la mejor intención…. Sin embargo, pocas veces nos planteamos las consecuencias a largo plazo y el flaco favor que les hacemos debilitando su fuerza de voluntad”.

La fuerza de voluntad o palabras como esfuerzo, disciplina o sacrificio están infravaloradas e incluso penalizadas en la actual cultura de la inmediatez, explica. “Pero las consecuencias son graves para el cerebro ya que la fuerza de voluntad opera como un músculo: se fortalece con la práctica, se fatiga con el uso excesivo o se atrofia con la falta del mismo. Podemos decir que la fuerza de voluntad necesita comer y dormir”.

Goleman, recuerda esta neuropsicoeducadora, definió la fuerza de voluntad -autorregulación, como la capacidad para diferir o aplazar las gratificaciones de manera racional y consistente, y lo incluyó como uno de los rasgos básicos de lo que todos conocemos como inteligencia emocional. “La ciencia ha demostrado que quienes se han dedicado a cultivar su fuerza de voluntad, han invertido en su educación y en su felicidad”.

Un famoso experimento llevado a cabo por la Universidad de Stanford a principios de los 70, el “experimento de la nube” (o malvavisco, o mashmallow), relacionó consistentemente comportamientos impulsivos llevados a cabo a corta edad con deficiencias en el desarrollo de esos mismos niños durante su vida adulta, vinculando la capacidad para aplazar una gratificación (un caramelo, en este caso), con la fuerza de voluntad a lo largo de toda la trayectoria vital. “Desde mi punto de vista, lo realmente interesante de este estudio, además de la fuerza de voluntad, es nuestra capacidad de encontrar estrategias para conseguir lo que realmente queremos”, concluye Romo.

LA MOTIVACIÓN, NUESTRA ALIADA

Otro psicólogo de la Universidad de Toronto, Michael Inzlicht, ha demostrado que sea cual sea el dominio de nuestro comportamiento, los mecanismos de nuestra fuerza de voluntad mejoran considerablemente cuando nuestra motivación es autónoma o independiente, en lugar de estar presionados o controlados externamente, relata esta experta, quien además recuerda que sin embargo, el fracaso de la voluntad es uno de los problemas centrales de la condición humana. De hecho, añade, “los déficits en la autorregulación se encuentran en un gran número de trastornos psicológicos incluyendo déficit de atención/hiperactividad (TDAH), trastorno antisocial de la personalidad, trastorno límite de la personalidad, adicciones, trastornos de la alimentación y trastornos de control de impulsos”. (...)

ENTRENAMIENTO PARA EL DÍA A DÍA

Pero, en realidad, la cosa no es tan negativa como parece. Según Romo, tenemos bastante éxito en resistir tentaciones. “Lo que sucede es que los fracasos destacan más, hacen más ruido en nuestro cerebro”. Como ya se apuntaba, la fuerza de voluntad reduce la tasa de ejecución de los impulsos no deseados del 70 por ciento al 17 por ciento . Aunque son buenas noticias, ese 17 por ciento puede causar muchos problemas. Esta experta propone algunas claves para desarrollar la fuerza de voluntad, teniendo en cuenta lo que la neurociencia nos enseña. “Son claves sencillas que si transformas en costumbres pueden convertirse en tus mejores aliadas”, dice Marta Romo.

1. Adopta estándares claros de autocontrol. Ten objetivos claros de autocontrol. En ocasiones somos ambiguos, generalistas y mezclamos nuestros propios límites. Esto nos lleva a tener dificultades con la fuerza de voluntad, no tanto porque no seamos capaces, sino porque no lo tenemos claro. Así que cada vez que te plantees un nuevo objetivo, formúlalo de la manera más clara posible, aunque te resulte soso.

2. Presta atención y lleva registros. Tener en mente la conducta que quieres controlar y contabilizarla ayuda y mucho. ¡Nos encantan los marcadores! Las personas comen más y beben más cuando no prestan atención, cuando están distraídas. En contraste, cuando se ponen a dieta a menudo llevan cuidadosos registros de qué comen y cuántas calorías consumen. Comparar la realidad con el estándar es clave para un autocontrol efectivo. Está demostrado que si tienes un 90 por ciento de la atención realmente no la tienes. Es necesario tener el 100 por ciento de concentración. Para tener éxito en tus propósitos, es fundamental

el foco. La multiplicidad hace que se pierda foco y nos despistemos.

3. Externaliza y confía tu voluntad en alguien. La atención se focaliza sobre todo con interacción social porque genera cierta tensión y recompensa inmediata cuando consigues tus resultados o los compartes. Así que compartir tus propósitos con los demás te ayudará a aumentar tus niveles de atención. Contar con un apoyo extra es formidable. Encontrar, por ejemplo, a alguien que te motive a ir al gimnasio o que vaya contigo, cuando ése es uno de tus objetivos.

4. Carga tus baterías de voluntad. La fuerza de voluntad se consume al usarla; el descanso y la glucosa, como hemos visto, ayudan. Menuda paradoja, para no comer se necesita voluntad, pero para tener voluntad se necesita comer (glucosa). Para cargar tus baterías, toma muy en serio la alimentación, el sueño, la actividad meditativa y no hacer nada.

5. Administra tu voluntad. Como hemos visto, tenemos una cantidad limitada de energía relacionada con el autocontrol. Hay actividades que también drenan esta misma energía, como tomar decisiones o resolver un conflicto. Por lo que el autocontrol puede flojear después de estas situaciones.

Así que de vez en cuando, se recomienda darle un descanso a la voluntad, dejar de apretar los controles. Los premios y el refuerzo positivo funcionan.

6. Busca la motivación autónoma. Sabemos que los mecanismos de nuestra autorregulación son favorables a nosotros mismos cuando la motivación es autónoma e independiente, y que estar presionados o controlados externamente bloquea nuestra fuerza de voluntad a largo plazo, ya que nos lo pone más difícil.

Hacer este ejercicio de discernimiento para identificar nuestras motivaciones intrínsecas antes de lanzarse por un objetivo es crucial para ponértelo más fácil. Y cuando no las hay, ármate de toda la artillería para combatir las posibles distracciones y dificultades que tú mismo te pondrás.

Consejo prácticos

7. Sal del automático. Como dice Baumeister: “El comportamiento habitual trabaja en piloto automático. Para incrementar el poder de la voluntad, debes sobre-escribir el piloto automático y tomar control”. Como la fuerza de voluntad se ejercita deliberadamente, es interesante que de vez en cuando te salgas de la rutina y busques hacer las cosas de otra manera.

8. Perdona tus errores. Cometer errores es inevitable y humano, pero tu fuerza de voluntad será más fuerte si logras superarlos. El problema es cuando nos quedamos enganchados a través de la culpa, que es adictiva, y los vivimos como un fracaso. “Perdonarte a ti mismo por tus errores aumenta la motivación y el compromiso con tus metas”, afirma la catedrática de la Universidad de Standford, Kelly McGonigal.

9. Identifica las posibles molestias que surgen cuando piensas en tu reto. Seamos realistas, ganar en fuerza de voluntad es incómodo. Anticipar ese posible malestar en forma de pensamientos, emociones o posibles distracciones, te ayuda a desmantelarlos, a estar prevenido antes incluso de que te asalten inesperadamente.

jueves, 5 de febrero de 2015

DIETA “BRASILEÑA”, QUE PROMETE CONVERTIRNOS EN “ÁNGELES DE PASARELA”.

Que si dieta mediterránea, anti edad, hipocalórica... Nos preguntamos qué comen las tops brasileñas más espectaculares del mundo que a su vez combinan con ejercicios de lo más efectivos para lucir esos cuerpos de infarto. Averigua cuáles son sus alimentos clave, sus menús perfectos y cómo funcionan a la hora de ayudarte a perder peso y ganar firmeza.

Por ejemplo, la top Karol Santos come platos con pequeñas raciones de verduras como la zanahoria y el brócoli, que no faltan en sus menús y proteínas magras aliñadas con limón.

Es que Brasil se ha convertido en la cuna de las tops que mejor se cuidan y con los mejores cuerpos del mundo desde hace años. Y esto ya no es una novedad, modelos como Gisele Bundchen, Adriana Lima, Alessandra Ambrosio o Isabeli Fontana siempre aparecen en las listas de las más sexys del mundo.

También viene otra generación de jóvenes tops como Daniela Braga, Barbara Fialho, Lars Ribeiro o Karol Santos o Luma Grothe, entre otras ‘new faces’ que vienen pisando fuerte. O algunas ya consagradas que no dejan de acaparan portadas como Caroline Trentini, incluso a los pocos meses de dar a luz o Ana Beatriz Barros.

Y es que sus rasgos exóticos de curvas generosas, morenas, con ojos de tonos imposibles además de tener que ver con sus genes, se deben a una dieta rica en alimentos que adelgazan, proteínas que reafirman y bebidas drenantes para acabar con las toxinas y la celulitis desde que son niñas.

Ricos frutos

Hacemos hincapié en la dieta ‘made in Brasil’ porque frutos como el coco, las bayas de açai y la piña tienen efectos poderosos para lograr una figura perfecta. Por eso, se ha convertido en una opción perfecta a la hora de alternar tu dieta mediterránea para perder peso.

Los trucos para adelgazar suponen una buena manera de eliminar la grasa acumulada si además lo combinamos con ejercicios originarios de este país que esculpen tu cuerpo como la capoeira, las artes marciales o disciplinas como las danzas samba o el zumba alternado con yoga o Pilates para quemar calorías.

Por no hablar de los innumerables beneficios de practicar surf o voleyplaya, dos de los deportes que suman más adeptas entre las tops brasileñas.

¿Por qué la dieta brasileña?

Porque es rica en platos antioxidantes, fibra y grasas saludables. Es una dieta donde el agua de coco se bebe a todas horas, “fundamental para tener tu piel hidratada por el gran aporte de minerales como potasio, magnesio, sodio, yodo, selenio y zinc que son fundamentales para todas aquellas que hacen deporte”, asegura la doctora Paula Rosso, del Centro Médico Lajo Plaza. Además, picar coco entre horas “aporta gran cantidad de oligoelementos como el cromo, aluminio, cadmio, flúor y manganeso. Se trata de un alimento muy remineralizaste ideal para evitar la retención de líquidos y así ver incluso nuestra piel más tersa y lisa”, asegura Rosso.

Y en ella, tampoco faltan otras frutas como “la piña, conocida por ser muy baja en calorías, alta en fibra, muy saciante y rica en una enzima llamada bromalina que le otorga grandes propiedades purificantes y drenantes, el mangostán con antocianinas y flavonoides anti edad o el rambután, una auténtica mina de vitamina C, imprescindible en la producción de colágeno para lograr una mayor firmeza”, sentencia la experta en nutrición.

Entre las variantes con nuestra dieta mediterránea se encuentra el aceite de coco que muchas veces sustituye al aceite de oliva, rico en aminoácidos y las frutas tropicales que su clima casi siempre agradable les proporciona: piña, bayas todopoderosas en antioxidantes como açai, verduras de hoja verde, legumbres como las lentejas o las alubias negras, frutos secos como las nueces de Brasil o los anacardos ricos en Omega 3 y hierro, ideales como tentempiés para las modelos más deportistas.



¡Apunta un menú healthy a la brasileña!



Desayuno

Batido de açai con piña y frutos rojos
Snack de cereales integrales, un puñado de nueces de Brasil o de anacardos
Agua de coco para beber entre horas

Almuerzo

Sopa de miso y ensalada de legumbres (lentejas o alubias negras con arroz integral)

Merienda

Arroz con leche de coco o compota de piña y ciruela

Cena

Salmón o pescado a la plancha o pollo o pavo con verduras de hoja verde y brócoli.



Los snacks

Otro ejemplo es Alessandra Ambrosio, quien disfruta de estos deliciosos tentempiés de açai con frutos rojos y cereales integrales entre horas.





QUICKIE

Gisele Bundchen por ejemplo, mantiene platos macrobiótico en su dieta con un toque brasileño, combinando quinoa, batata, coliflor y remolacha.